Mitos en Seguros

Son tantas las veces que nos llegan rumores sobre los seguros y por esto más de una persona se ha arrepentido de adquirir uno, también hay otro dicho que dice que cada quien habla como le va en la feria, pero entonces, ¿qué parte de los seguros son verdad y que parte son un mito?, pues bien, aquí desmentimos las frases o mitos más comunes:

» EL QUE PEGA, PAGA»

Esto no siempre tiene razón; cuando hay un percance automovilístico las aseguradoras determinarán quien tiene la responsabilidad con base en el reglamento de tránsito, por ejemplo; si tú te vas incorporando a una avenida y el de atrás te pega, tú tienes la responsabilidad, pues al incorporarte debes medir la distancia y cuidar el ingreso ya que la prioridad la tienen los que van sobre el camino más amplio.

«LOS SEGUROS NUNCA PAGAN»

En nuestra labor como agentes te podemos asegurar que esto no es cierto, durante el tiempo que llevamos como agentes hemos podido darnos cuenta de las bondades de tener un seguro y cómo este puede ser la diferencia entre una familia con deudas y conflictos y una experiencia que no resquebraja el patrimonio familiar. Todos los productos tienen sus Condiciones generales autorizadas por la Comisión Nacional de Seguros y de Fianzas y una operatividad, por eso si la situación se encuentra como una exclusión o con un periodo de espera es procedente que va a haber un rechazo a la indemnización, ahí es donde recae la importancia de revisar lo que estamos contratando e investigar cómo hacer uso de la póliza de una manera eficiente. Algo importante a mencionar es que las Aseguradoras están reguladas por la CNSF y la CONDUSEF por lo que no pueden rechazar siniestros sin un fundamento.

«NO CONVIENE TENER UN SEGURO»

Un grave error que cometen muchas personas es ver el seguro como un negocio. El seguro no es más que una herramienta financiera para salvaguardar nuestro patrimonio, por ello si queremos obtener un beneficio adicional por contratarlo estamos en un error y es lógico que nos decepcionemos de la respuesta de la Aseguradora. Recuerda que las instituciones de seguros no son institución de beneficencia, son un negocio, que, como todos, busca tener una utilidad y rentabilidad, es por ello que se establecen reglas de operación, también es importante recordar que la razón de ser del seguro es buscar proteger el patrimonio familiar de los asegurados, no la obtención de una ganancia.

«LOS SEGUROS SON MUY CAROS»

Un seguro puede ser contratado a la medida de tus posibilidades, no necesariamente un seguro caro va a cubrir lo que realmente te preocupa; ahora bien, te hago las siguientes preguntas ¿qué crees que es más caro?, ¿pagar un seguro que te cobra un mínimo porcentaje sobre la suma asegurada o cubrir el riesgo al 100% directamente de tu billetera?, además hay algo que no tiene precio, y esto es tu TRANQUILIDAD, el contar con un seguro te hace sentir que no estás solo y que tienes la capacidad de elegir.

«NO VALE LA PENA ASEGURARME JÓVEN»

La gran mayoría de las personas que se acercan a una Aseguradora para asegurarse en un producto de Vida o de Gastos médicos mayores, lo hacen porque conocen o conocieron a alguien que por no tener un seguro arriesgaron de más su patrimonio, pusieron en riesgo su recuperación o incluso fallecieron sin tener protegida a su familia; o en su caso, conocieron a alguien en donde un seguro les salvó de tener eventos desastrosos como los que anteriormente mencioné, es difícil que una persona joven se asegure, tal vez porque piensa que a su edad no le pasará nada malo, que por el momento no tiene el suficiente ingreso o que ya habrá tiempo para asegurarse después; sin embargo, permíteme comentarte que los seguros de gastos médicos mayores tienen periodos de espera para cubrir las enfermedades más comunes a las que se están expuestas, tal como una hipertensión o incluso cáncer, si no hubieres creado esa antigüedad que te solicita cada seguro de acuerdo a sus condiciones generales, la aseguradora no podrá cubrir dicha enfermedad y por tanto te sentirás decepcionado de haber contratado un seguro a destiempo, además, entre más joven te asegures más barata es la prima de riesgo; en cuanto al seguro de vida, a partir de los dos años de cobertura el seguro se vuelve indisputable, es decir, que puede cubrir incluso un suicidio. Por tanto, considero que vale la pena asegurarnos a una edad temprana, así crearemos un hábito de prevención, blindaremos nuestro crecimiento económico y protegeremos a nuestros seres queridos.

» MI ESPOSA / ESPOSO SE ENRIQUECERÁN EN MI FALLECIMIENTO»

A lo largo de mi vida laboral he escuchado sobre todo a hombres decir que no se aseguran para evitar que en un fallecimiento su esposa disfrute el dinero con otro hombre, esta es una frase común en nuestra sociedad; sin embargo, en alguna otra ocasión un cliente me comentó: «Yo no pienso así, yo creo que si muero mi esposa va a tener la capacidad de elegir al hombre que la haga feliz, y no con quien pueda sobrevivir«.
Esto multiplica su importancia si hay hijos de por medio ya que la historia familiar puede dar una vuelta de 180 grados sin el ingreso del padre o de la madre, adicional, si no hay un fallecimiento, pero sí una invalidez total y permanente de la persona que aporta económicamente a la familia, además de no haber un ingreso hay gastos adicionales que jamás se contemplaron en el plan.
Un seguro puede prever todas estas situaciones y ser un apoyo eficiente ante estas inesperadas circunstancias.

Seguros
Seguros

Nuestra recomendación para contratar un seguro es:

  • Siempre leer las condiciones generales
  • Preguntar por las exclusiones y periodos de espera
  • Revisar todos los datos de la póliza de seguro

Esto te hará sentir protegido y convencido que es realmente la cobertura que necesitas, de lo contrario, solicitar un cambio o ajuste a tu Agente de Seguros.

En SIGURAT, Agente de Seguros y de Fianzas, somos transparentes con nuestros clientes, les explicamos que un seguro no puede cubrir todo, pero siempre intentamos que cubra la mayoría de sus preocupaciones armando un traje a la medida de sus necesidades.